Fundamentos de la vacuidad (iii)

He de examinar la vacuidad con una buena intención, con cuidado, pensando: Así es que la vacuidad no es la nada, sino la naturaleza real de los fenómenos; es las cosas tal como son en realidad. Es la manera en que las cosas existen en oposición a la manera en que aparecen, o parecen existir. Esto se explica así:

De forma natural creo que las cosas que veo a mi alrededor son verdaderamente existentes porque creo que existen exactamente de la manera en que aparecen -- pero la manera en que las cosas aparecen a mis sentidos es engañosa y está en total contradicción con la manera en que las cosas existen en realidad. Todas las cosas aparecen como existiendo de su propio lado, independientes de la mente.

La instrucción que he de aprender es sólo hasta aquí. Para recordarla, puedo aplicarla a todo lo que encuentre. Así: Creo que mi cuerpo que veo es verdaderamente existente porque creo que existe exactamente de la manera en que aparece -- pero la manera en que mi cuerpo aparece a mis sentidos es engañosa y está en contradicción con la manera en que mi cuerpo existe en realidad. Mi cuerpo aparece como existiendo de su propio lado, independiente de la mente. Igualmente: Creo que soy verdaderamente existente porque creo que existo exactamente de la manera en que aparezco. Pero la manera en que el yo aparece a mis sentidos es engañosa y está en total contradicción con la manera en que el yo existe en realidad. El yo aparece como existiendo de su propio lado, sin depender de la mente.

Igualmente: Creo que el mundo que veo es verdaderamente existente porque creo que existe exactamente de la manera en que aparece, o parece existir -- pero la manera en que el mundo aparece a mis sentidos es engañosa y está en completa contradicción con la manera en que el mundo existe en realidad. El mundo aparece como existiendo de su propio lado, independiente de la mente. Igualmente: Creo que el lugar donde vivo es verdaderamente existente porque creo que existe exactamente de la manera en que aparece -- pero la manera en que el lugar donde vivo aparece a mis sentidos es engañosa y está en completa contradicción con la manera en que el lugar donde vivo existe en realidad. Etc.